Ven, hablemos

Algo que se remarcó mucho en este paseo fue la importancia de la comunicación. Se que se menciona mucho en todos lados, y es porque en verdad hay que tenerlo muy presente.

La comunicación nos permite una buena convivencia. Es importante decir lo que queremos y lo que no, crear acuerdos, decir lo que nos pasa. Muchas veces yo no decía ciertas cosas para no causar incomodidades, pero después era más incómodo. Yo terminaba llorando o haciendo mala cara y eso angustiaba a Amandine. Una vez casi me desmayo por no decirle que paráramos y tomaramos aire. Amandine se angustió full y hasta se molestó.

Ese evento fue un jalón de orejas y desde ahí procuré comunicar todo. Empecé a decir lo que me gustaba y lo que no, lo que sentía, lo que necesito y decir no. Creo que esto hizo aún mejor nuestra convivencia. Ella también me pudo expresar sus pensamientos y sentimientos.

Hoy sigo reforzando esa comunicación que es tan importante para nuestro bienestar. De hecho, he escrito otras cosas al respecto. Tras esta experiencia y los días siguientes, reafirmo que es un súper poder expresar y escuchar.